Llamazares arranca su campaña 2.0 invitando a los ciudadanos a reconquistar sus derechos

Casi un centenar de militantes y simpatizantes participaron en el arranque de la campaña 2.0 de Gaspar Llamazares como candidato de IU de Asturias al Congreso. La operación “Reconquista”, la de la lucha por la recuperación de los derechos sociales, por la defensa de los servicios públicos, y por la “dignidad” de los ciudadanos frente a los mercados, en palabras de Llamazares, es solo el inicio de una manera de trabajar y de entender la política que el futuro diputado por Asturias quiso trasladar a los militantes de la organización y “cibervoluntarios”. A través del Facebook, en el Twitter, el Tuenti, pero también en los escaños de la Carrera de San Jerónimo, Llamazares se comprometió a seguir siendo ese diputado que se rebela contra los abusos, que expone sus ideas en la red, recibe criticas e iniciativas y comparte su agenda con los ciudadanos.

Gaspar Llamazares, el diputado ciudadano, describió a los voluntarios la nueva fórmula, el nuevo tipo de parlamentarismo que quiere llevar a cabo. “No es solo hacer una campaña en la redes sociales, sino que lo que haremos es trabajar en red”, afirmó el actual portavoz de IU en el Congreso. De esta forma se comprometió a presentar la agenda de trabajo en la red, a someterse al balance ciudadano de las iniciativas parlamentarias e incluso a consultar aquellas propuestas que surjan a lo largo de la legislatura, fuera del programa electoral, sobre las que habrá que tomar decisiones en función de la coyuntura.

La página web de Gaspar Llamazares para esta campaña (www.gasparllamazares.es) aún no está diseñada a la espera de las aportaciones de los voluntarios, aunque ello haya supuesto algunas críticas en Twitter, como el candidato reconoció ante los voluntarios asturianos. “La web todavía no está porque queremos que hagáis la web que vosotros queréis”, explicó en el hotel Tryp de Oviedo.

A este centenar de personas agradeció su compromiso y su presencia en un día festivo parafraseando un artículo de Gramsci titulado “odio a los interesados” que el candidato cambió por un “amo a los comprometidos”.